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Descansa: 4 señales de que necesitas dejar de correr por un tiempo
Te has enamorado del running, ¿podría haber algo mejor? Sin embargo, el exceso, aunque sea de algo bueno, también puede conllevar inconvenientes y, en cuanto a correr, podrían ser lesiones, agotamiento u otros problemas de salud. Descubre las señales que te avisan de que necesitas dejar de correr (por un tiempo) antes de que sea demasiado tarde.
Correr es fantástico: mejora tu estado de ánimo, te mantiene en forma y te pone a tono para el día o la semana. Es fácil que te apetezca correr todos los días. Pero si no tienes cuidado, te verás obligado a dejar de hacerlo. Estamos hablando de agotamiento físico y mental, lesiones o perder demasiado peso, entre otras cosas.
Presta atención a las siguientes señales de alarma si quieres poder seguir corriendo en lugar de ver las carreras por la televisión.
1. Tu cuerpo comienza a romperse
Cuando tienes dolores constantes, te cuesta mantener el ritmo normal y tienes que tomarte días libres debido a una dolencia, es señal de que debes parar. Para empezar, deja de correr unos días para que tu cuerpo pueda descansar y recuperarse. Puedes hacer un entrenamiento cruzado breve y suave mientras tanto para mantenerte animado y en buen estado cardiovascular, pero recuerda el propósito del descanso. Si después de unos días sigues sintiéndote mal, es posible que debas acudir a un médico especialista.
2. El cansancio está acabando contigo
Vivir con cansancio es otra señal de que debes dejar de correr por un tiempo. Si te cuesta levantarte de la cama por las mañanas, la carrera más fácil se te hace un mundo e incluso notas el cerebro aturdido y lento, frena, deja de salir a correr unos días y céntrate en dormir y comer bien.
3. Pierdes peso demasiado rápido
Si bien una de las ventajas de correr es tener un cuerpo más delgado y fuerte, perder demasiado peso por correr demasiados kilómetros es señal de que te estás pasando. Si tu báscula indica que has perdido mucho peso en poco tiempo, corre menos. Si eres mujer, también podrías experimentar la ausencia de menstruación, una importante señal de alerta para la salud que necesitará que vayas al médico.
4. Te has estancado
Durante un tiempo, has venido experimentando todo tipo de progresos en tu forma de correr: yendo cada semana más rápido, viendo cómo mejoraban los resultados de tus carreras y sintiendo que correr te resultaba más fácil día tras día. Pero has llegado a un punto donde no importa lo mucho que te esfuerces o la frecuencia con la que corras, tu ritmo se ha estancado. Esta es otra señal inequívoca de que necesitas acabar con la rutina. Céntrate en descansar y comer bien para volver a correr con calma después de unas semanas.
Si correr se ha convertido en tu obsesión, lo entendemos. Pero existen obsesiones sanas y obsesiones insanas. Presta atención a los signos de cansancio, las lesiones o cualquier otra señal que te avise de que tienes un problema. Si las notas, podría ser el momento de dejar de correr por un tiempo. Mantente activo para que puedas disfrutar de muchos años más corriendo de forma saludable.
Nuestro consejo como redactores responde únicamente a fines didácticos generales e informativos. Nuestra recomendación siempre es que consultes a tu médico o especialista en salud antes de introducir modificaciones en tus entrenamientos, tu nutrición o tus rutinas de ejercicio físico.
